"Si pudiésemos abandonar la sabiduría y la sagacidad,
la gente podría disfrutar el ser todos iguales.
Si pudiésemos abandonar el deber y la justicia,
todo podría basarse en las relaciones de amor o amistad.
Si pudiésemos abandonar el artificio y el provecho,
la corrupción y el robo podrían desaparecer.
Aún así, semejantes remedios solo tratarían los síntomas
Por lo tanto, son inadecuados"
(Del Tao de Lao Tse)
¿Dónde dejaste el paraguas?
Tras diez años de severa disciplina, Zenno ya se consideraba digno de ser elevado a la categoría de maestro zen. Un día lluvioso fue a visitar al famoso Nan-in. Al entrar en su casa, éste le preguntó:
-¿Has dejado fuera tu paraguas y tus zapatos?
-Por supuesto -respondió Zenno-. Es lo que manda la buena educación. Actuaría de la misma manera en cualquier lugar.
-Entonces, dime, ¿pusiste el paraguas a la derecha o a la izquierda de tus zapatos?
-No tengo la menor idea, maestro.
-Zen es el arte de tener conciencia total sobre lo que hacemos -explicó Nan-in-. La falta de atención a los pequeños detalles puede destruir por completo la vida de una persona.
Un padre que sale corriendo de la casa puede olvidar un puñal al alcance de su hijo pequeño. Un samurái que no mira todos los días su espada la encontrará oxidada cuando más necesite de ella. Un joven que olvida llevarle flores a su amada terminará por perderla.
Y Zenno comprendió que, aunque conocía bien las técnicas zen del mundo espiritual, había olvidado lo más importante: aplicarlas a la vida cotidiana, en el mundo de los seres humanos. Para reparar su descuido permaneció otros diez años practicando zen y prestando atención a los pequeños detalles, sobre todo cuando visitaba al adorable, venerable y temible Nan-in.
(Tomado de un recorte que llegó a mis manos, aunque suelo leer el Tao Te King )
"Son los pequeños detalles con los demás los que nos hacen más grandes, y se nos olvida a menudo "
Estoy de acuerdo en que los pequeños detalles son los que realmente nos llenan el alma de alegría y luz.
ResponderEliminarBesos.
Muchas gracias Ilesin por tu comentario. Lo pequeño a veces se vuelve grande.
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ResponderEliminarActuamos por inercia, pero solo en cosas pequeñas que no son importantes. No podemos estar todo el tiempo pendientes de todos nuestros movimientos, yo por lo menos no tengo esa capacidad. Abrazos
Yo si que soy detallista desde muy pequeña. Es un don, aunque no hasta el punto de fijarme de manera consciente siempre, pero pero tengo buena memoria visual,que aún conservo.
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Querida amiga Katy, es cierto y peco cada día de ello pero me escondo detrás de una cortina que llamo olvido: aunque en realidad, no soy capaz de recordar una fecha determinada. Buenos días y gracias por compartir sabiduría. Un abrazo a las 6 de la mañana. aquí. Isidro
ResponderEliminarMil gracias a ti Isidro. Una cosa es la memoria, de olvidar cosas sobre todo cuando estás estresado y otra no fijarte en detalles. Eres muy pero que muy detallista, no tengas cuidado:-)
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Yo sí que soy de pequeños detalles, sé que no soy perfecta, nadie lo es, pero procuro actuar siempre buscando la perfección.
ResponderEliminarQuizá éste sea mi mayor defecto, pues busco lo mismo en los demás.
Un beso Katy.
Por supuesto que no me voy a dedicar 10 años a hacer Zen:-) Pero el que es detallista lo será siempre. Desde muy niña tenía esta cualidad que he seguido cultivando. Me alego de compartirlo contigo.
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Bss
Muy buena reflexión para ponerla en práctica en el día a día y no sólo en ciertos momentos.
ResponderEliminarBesos Katy
Creo que si, tampoco ha¡y que forzar la máquina, ni fustigarse porque se nos escapan a veces algunos detalles, pero si serlo cuando nos acordamos. Hay tantas formas de demostrarlo.
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Sí :) Jamás podré llegar a ser zen, ya perdí la cuenta de los paraguas perdidos, pero la reflexión me acompañará siempre, katy, soy despistada, pero tengo muy buena memoria
ResponderEliminarUn abrazo
Muy bueno Alma, ni yo lo seré jamás, pero si que es cierto que cuando se intenta se consigue aunque sea esporádicamente. Alguien te lo agradecerá.
EliminarYo antes me dejaba mi paraguas en las cabinas de teléfono. Irrecuperables:-)
Bss
Así mismo en la vida común. Muchos creemos ser lo que decimos, pero con frecuencia hay una clara divergencia entre lo que dicen nuestros labios y lo que llevamos a la práctica: a eso se llama hipocresía o fariseísmo.
ResponderEliminarUn beso
Buena observación, con los que convivimos tendrían que ser objeto de estos pequeños detalles. Cuanto se agradecen.
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ES CIERTO, LOS PEQUEÑOS DETALLES HACEN GRANDE A UNA PERSONA Y ES LO QUE HAY QUE VALORAR.
ResponderEliminarUN BESO GRANDE.
Muchas gracias Lujan, pienso que este sentido de hacer algo, se prestar atención a las pequeñas cosas que pasan desapercibidas con los amigos, pareja, conocidos nos hacen bien en primer lugar a nosotros mismos.
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Me parece que me vendrían bien a mí diez años practicando zen, jiji, porque soy de las que no recuerda dónde deja las cosas.
ResponderEliminarFeliz día, madame
Bisous
No solo a usted madame a mi tampoco me vendría nada mal. Buen finde
EliminarBisous
Que gran cita del Tao y que buen cuento. Yo no siempre lo consigo, pero intento estar pendiente de los pequeños detalles... de todo tipo. A veces parece que llevamos anteojeras, como los burros, y sólo somos capaces de mirar en una dirección.
ResponderEliminarAbrazos, katy. Me ha gustado mucho esta entrada
Muchas gracias por reparar en este detalle. .A veces como señalas pasa desapercibido lo pequeño , pero quien se fija en lo pequeño tiene un gran espíritu, porque lo grande lo ve cualquiera.
EliminarBss y buen finde.