Piensa

La vida es corta para levantarnos por la mañana con tristezas, nadie dice que será fácil, sólo te puedo asegurar que valdrá la pena

Seguidores

viernes, 4 de junio de 2010

Las "Salidas" e ironía fina de Borges

«Que un individuo quiera despertar en otro individuo recuerdos que no pertenecieron más que a un tercero, es una paradoja evidente. Ejecutar con despreocupación esa paradoja, es la inocente voluntad de toda biografía.» J.L.Borges 

 *Durante la dictadura militar alguien le comenta a Borges que el general Galtieri, presidente de la República en ese momento, ha confesado que una de sus mayores ambiciones es seguir el camino de Perón y parecerse a él. -¡Caramba! -interrumpe Borges- es imposible imaginarse una aspiración más modesta'. *Borges firma ejemplares en una librería del Centro. 
Un joven se acerca con Ficciones y le dice: -”Maestro, usted es inmortal”. Borges le contesta: -Vamos, hombre. No hay por qué ser tan pesimista. *Roma, 1981. 
Conferencia de prensa en un hotel de la Via Veneto. Además de periodistas, están presentes Bernardo Bertolucci y Franco María Ricci. 

Borges, inspirado, destila ingenio. Llega la última pregunta. -¿A qué atribuye que todavía no le hayan otorgado el Premio Nóbel de Literatura?' - A la sabiduría sueca. * En una entrevista, en Roma, un periodista trataba de poner en aprietos a Jorge Luis Borges. Como no lo lograba, finalmente probó con algo que le pareció más provocativo: -¿En su país todavía hay caníbales? - Ya no - contestó aquél -, nos los comimos a todos. *En plena Guerra de las Malvinas, opinó que: la Argentina e Inglaterra parecen dos pelados peleándose por un peine y que las islas habría que regalárselas a Bolivia para que tenga salida al mar. *En una reunión sobre la situación de la literatura argentina, Córdoba Iturburu, que la presidía, inquirió a los gritos: -'¿Y qué vamos a hacer por nuestros jóvenes poetas? 

Desde el fondo llegó otro grito, éste de Borges: -'¡Disuadirlos!' *En la pausa de un acto cultural, el novelista Oscar Hermes Villordo acompañó a Borges al baño, situado en un primer piso al que se llegaba por una empinada escalera de madera. 
 Cuando volvían, Villordo notó que Borges descendía los escalones demasiado rápido y, temiendo lo peor, le preguntó:' -¿No deberíamos ir más despacio?' -Pero no soy yo, aclaró Borges, es Newton. *Borges charla con Antonio Carrizo, en un bar. Por la radio del local se anuncia un tango con letra de León Benarós, amigo de Borges. El locutor propone escucharlo y el escritor acepta. Cuando el tango termina, Carrizo le pregunta qué le pareció. Borges mueve la cabeza y dictamina, muy preocupado: -

Esto le pasa a Benarós por juntarse con peronistas. 
 *El poeta Eduardo González Lanuza, uno de los introductores del ultraísmo en la Argentina y gran amigo de Borges, descubre a éste en Florida y Corrientes, solo, con su bastón, esperando para poder cruzar. Lo toca y le dice: -Borges, soy González Lanuza. El vuelve la cabeza y, después de unos segundos, contesta: -Es probable. 
 *En Maipú y Tucumán, un grupo de adictos a Isabel Perón descubre a Borges y lo sigue unos metros, insultándolo. Al ingresar en su casa, un periodista le pregunta cómo se siente. -Medio desorientado - manifiesta -Se me acercó una mujer vociferando: ¡Inculto! ¡Ignorante! 
 *Un joven poeta se acerca a Borges en la calle. Deja en manos del escritor su primer libro. Borges agradece y le pregunta cuál es el título. -“Con la patria adentro”, responde el joven. -Pero qué incomodidad, amigo, qué incomodidad. 

 *El escritor argentino Héctor Bianciotti recuerda una de las tantas salidas elegantes de Borges, cuando le incomodaban los halagos de la gente. Ocurre en París, en un estudio de televisión. -¿Usted se da cuenta de que es uno de los grandes escritores del siglo?, lo interrogan. -Es que este, evalúa Borges, ha sido un siglo muy mediocre. 
 *Una mañana de octubre de 1967, Borges está al frente de su clase de literatura inglesa. Un estudiante entra y lo interrumpe para anunciar la muerte del Che Guevara y la inmediata suspensión de las clases para rendirle un homenaje. 
Borges contesta que el homenaje seguramente puede esperar. Clima tenso. El estudiante insiste: Tiene que ser ahora y usted se va. Borges no se resigna y grita: -No me voy nada. Y si usted es tan guapo, venga a sacarme del escritorio. El estudiante amenaza con cortar la luz. -He tomado la precaución -retruca Borges- de ser ciego esperando este momento.

 *A principios de la década de los setenta, el escritor y psicoanalista Germán García invita a la Argentina a Daniel Sibony, matemático y psicoanalista francés. Sibony quiere conocer a Borges. Al encontrarse, el francés le pregunta en qué idioma desea hablar. -
Hablemos en francés, propone Borges, y justifica: -Dicen que la lengua francesa es tan perfecta que no necesita escritores. A la inversa, dicen que el castellano es una lengua que se desespera de su propia debilidad y necesita producir cada tanto un Góngora, un Quevedo, un Cervantes. *Una revista de actualidad reúne a Borges con el director técnico César Luis Menotti. -'Qué raro, ¿no? Un hombre inteligente y se empeña en hablar de fútbol todo el tiempo', comenta Borges más tarde. En 1983, un periodista de La Nación pide a Borges su opinión sobre la Guerra de Malvinas. -'Absurda', define Borges. 'Estoy triste, muy triste. Mandaron a esos pobres muchachos de veinte años a morir al sur’. Tener veinte años y pelear contra soldados veteranos es algo atroz, inconcebible. Solamente en el crucero General Belgrano murieron cientos. Claro que los militares dirán que al lado de los desaparecidos esa cifra no es nada, pero no creo que les convenga ese argumento. No, no les va a convenir... 
 *El 10 de marzo de 1978, en la Feria del Libro, Borges se cruza con un escritor al que quiere y respeta, Manuel Mujica Lainez. Se abrazan e inician una conversación que es interrumpida una y otra vez por los cazadores compulsivos de firmas. -A veces' -se queja Borges- pienso que cuando me muera mis libros más cotizados serán aquellos que no lleven mi autógrafo. 
 *En 1975, a los 99 años, muere Leonor Acevedo de Borges, madre del escritor. En el velorio, una mujer da el pésame a Borges y le comenta: -Peeero...pobre Leonorcita, morirse tan poquito antes de cumplir los 100 años. Si hubiera esperado un poquito más... Borges le dice: -Veo, señora, que es usted devota del sistema decimal. *Borges y un escritor joven debaten sobre literatura y otros temas. El escritor joven le dice: -Y bueno, en política no vamos a estar de acuerdo, maestro, porque yo soy peronista. Borges contestó: -¿Cómo que no?... Yo también soy ciego. 

  Jorge Francisco Isidoro Luis Borges (Buenos Aires, 24 de agosto de 1899 – Ginebra, 14de junio de 1986) fue un escritor argentino, uno de los autores más destacados de la literatura del siglo XX. Publicó ensayos breves, cuentos y poemas. Ciego a los 55 años, personaje polémico, con postura políticas que le impidieron ganar el Premio Nobel de Literatura al que fue candidato durante casi treinta años, Borges siempre soñó con que la posteridad le perdonara sus errores y le concediera la gloria de que se lo recordase por sus mejores textos. Con el tiempo

10 comentarios:

  1. Qué sabiduría y saber estar, de uno de los grandes del mundo.
    Saber salir de esas situaciones es de ser de una inteligencia inconmensurable.
    Gracias Katy por acercárnoslo

    ResponderEliminar
  2. Hola Candi, el saber estar y la elegancia en gestos y modales van unidos. La inteligencia es unos de lo medios para demostrarlo. Y Borges desde lue4go lo ers, como bien apuntas. Besos

    ResponderEliminar
  3. Anónimo5/6/10 16:34

    Hola Katy!! Qué puedo agregar a tu maravilloso post amiga. Mi admiración a Borges es demasiado grande. Esa ironía tan inteligente sólo la pueden tener personajes como él. Yo era muy joven pero no me perdía entrevistas que le hiciesen, quedaba maravillada por sus respuestas. Gracias amiga por compartirlo.
    Besosssssss

    ResponderEliminar
  4. Ya me lo he imaginado Gabriela, porque además de tener la palabra ade cuada siempre en la boca, era argentino. Yo tembién le admirado un montón.
    Besos

    ResponderEliminar
  5. Un hombre admirable, sin duda. Esa ironía sólo puede tenerla quien posee una inteligencia y un ingenio superiores.

    Sólo hay algo que no me ha gustado nunca de Borges: una vez, dijo que leyó el Quijote en inglés y le maravilló, pero cuando lo leyó en castellano, quedó decepcionado. Me parece que, en esa ocasión, no estuvo muy afortunado.

    Besos, Katy.

    ResponderEliminar
  6. Anónimo5/6/10 23:49

    ¡Que buena selección nos has traído del gran Borges!

    Me ha encantado el "punto" de los canibales :)) ¡¡Que bueno...!!

    Gracias por traernos este regalo.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  7. Hola Periquiyo, desde luego si dijo eso no es lo más adecuado. Porque una obra si entra en las posibilidades de ser leída en el idioma original en el que se ha escrito es lo autético. Las traduciones son necesariasa, pero siempre pierden calidad.
    Pero me extrañas que un hombre de su talla dijera eso.
    Es como leer Shakespeare en castellano :)
    Besos y buen domingo

    ResponderEliminar
  8. Me alegro Caracola que te gustara . Borges desde luego no deja indiferente a nadie.
    Gracias a ti por pasarte y por tu comentario.
    Besos y feliz domingo

    ResponderEliminar
  9. ...........realmente interesante tu blog ...........No sé como llegué espero no perderme ya que quiero volver a leerte

    ResponderEliminar
  10. Muchas gracias Recomenzar por tu comentario. Suele suceder que navegando te des de bruces con algún blog que te gusta, y me alegro que ese haya sido uno de los mios.
    Espero verte por aqui más amenudo siempre que gustes y te apetezca claro:)
    Un abrazo

    ResponderEliminar

Gracias por tu pasos y mucho agradezco que dejes tu huella,

Translate

Powered By Blogger