Me acaba de llegar este e-mail y me he reído bastante. Es un poco exagerado pero tiene gracia como lo cuenta la persona que lo escribió. Mucho humor. Me parece simpático. Para reír un poco este finde. Seguro que nos vemos reflejadas aunque lo lógico será negarlo. Ya me contaréis!!!!! Ya.
COMPLOT
Las mujeres somos víctimas de un complot urdido por mentes perversas que se reunen en un lugar secreto y deciden lo que ellos llaman 'tendencias de moda'.
¿Quienes son? ¿Cómo lo hacen?
Yo me imagino que llega Paco Rabanne y dice:
- 'Veo que este año se va a llevar el azul petróleo'.Y saltan a dúo Victorio y Lucchino:
- 'Eso, eso. Y los jerséis sin mangas, pero de cuello alto, ¡y que se jodan!'.
¡Y date por jodida! Porque la moda no es una industria. ¡Es una secta dirigida por antifeministas!!! Y de esos seres que nos odian ¿qué podemos esperar?...
Si nos hacen ir con estos pantalones que se abrochan en la rabadilla y nos hacen creer que vamos bien (Creo que lo hacen para que luzcamos esos ridículos tangas que tanto molestan).
O con esos otros pantalones de pata larga que van limpiando las aceras.
¿Saben lo que son las fashion victims?
Son las mujeres que han caído en sus redes y ya no pueden escapar. Esas que cuando se acercan a un escaparate, oyen voces en su cabeza:
-'El poder de la moda te obliga', 'el poder de Dior te gobierna'.
Realmente, yo me di cuenta del poder que tiene esta secta cuando intenté comprarme un vestido rojo.-
-Parece fácil, ¿verdad? Un vestido rojo. Pues no. ¡Porque las tiendas están en el ajo! Son las representantes de Dior en la tierra. Y, claro, llego yo, y le digo a la dependienta:
- Buscaba un vestido rojo.
Y me suelta:
- ¿Rojo? Este año no viene nada en rojo. Este año viene el azul petróleo.
- ¿Y eso rojo de ahí?
- Eso es la funda del extintor, pero si quieres te la saco.
¡Así es como empiezan las sectas: anulando tu voluntad! Porque, de repente, me veo diciendo:
- Vale, sácame uno azul petróleo de la 38.
Y, en ese momento, la dependienta me mira como se mira un Fiat Panda desde un todoterreno:
- ¿La 38? Tú estarás entre la 40 y la 42.
Claro, yo la miré a ella como diciendo: 'Y tu estarás entre gilipollas y tonta del culo' Pero le dije:
- Perdona, yo soy una 38.
- No, si ya. Pero es que este año viene la 38 ceñida, ¿sabes?
Y es que ese es el segundo paso de la estrategia de la secta.
Disminuir tu autoestima para poder dominarte mejor. Ahí, yo dije:
- Con esto no me pillan. ¡Yo me pruebo la 38 aunque me la tenga que meter a rosca! Y, claro, te miras al espejo y ves lo que ves.
Una morcilla. Una morcilla azul petróleo.
Y digo yo: si en todo el mundo un metro es un metro y un kilo es un kilo, ¿por que la talla 38 no es siempre la talla 38?
Tú vas al Carrefour y la talla 38 se la puede poner King África y, sin embargo, te vas a Versace y la 38 no se la pone ni Melody.
Total, que hice lo que hacemos todas: llevármelo. Si, porque pensé lo que pensamos todas:
-'Así me obligo a adelgazar'. 'Me obligo adelgazar.'
¿Seremos idiotas? A las dos semanas te estás obligando a regalárselo a tu sobrina. ¡Es como comprarte unos zapatos del 34 para obligarte a que te encoja el pie!
Pero es que ese es otro de los síntomas de que estás entrando en la secta: someterte voluntariamente al sufrimiento físico. Aunque, a veces, cuando todavía no estás abducida del todo, consigues tener un momento de lucidez y decir:
-'No, no me lo llevo'.
Y, entonces, esa enviada del mal que es la dependienta te dice la frase definitiva:
-
Llévatelo, no seas boba, ¡que lo puedes devolver!
¡Y lo compramos! Como lo puedes devolver... Eso es como comerte un trozo de moqueta: ¡como lo puedes devolver!
Así que volví a casa con mi vestido azul petróleo de la 38. Me lo pongo y le pregunto a mi marido: - ¿Cómo me queda?
- Pequeño.
- ¿Si? ¿Me marca mucho?
- Te va a hacer llagas.
Ahí me dije: 'Tere, modérate.
Esta es otra prueba. La secta de la moda quiere que rompas lazos con tu entorno'. '¡No, no van a poder conmigo!'.
Me lancé a la calle y no paré hasta que encontré el único vestido rojo que quedaba en toda la ciudad. Cuando lo vi, dije:
- '¡Me lo compro! ¡Que le den a Paco Rabanne !. Y que Victorio le dé a Lucchino …' ¡Ja! Y salí de la tienda triunfante, con mi vestido rojo. Pero la alegría me duró dos escaparates.
Es algo que nos pasa a todas las mujeres. De repente, se te viene el mundo encima: 'Coño, ¿y
qué hago yo con un vestido rojo, si este año lo que se lleva es el azul petróleo?'
Oye, que no pude pegar ojo en toda la noche. Tuve unas pesadillas...
Estaba yo en una misa
negra, atada de pies y manos, y los grandes gurús de la moda, rodeándome como en Poltergeist: 'Tereee. Veeen hacia el glamouuuuur.'
Total, que me desperté, empapada en sudor y dije: '¡Vale, esta bien! ¡Me rindo!'
Me unté entera con vaselina para que me entrara el traje, y me presenté en la boda de mi amiga Jessi, vestida de azul petróleo.
Cuando llegué a la iglesia me encontré con que íbamos todas iguales....Allí había más azul petróleo que en una playa del golfo Pérsico.
Ahí te das cuenta de que te han captado, has entrado en la secta, y a partir de ese momento honrarás a Victorio y a Lucchino, no nombrarás a Chanel en vano y amarás a Dior sobre todas
las cosas.
PD. ¿Alguien me puede explicar que narices es el color 'azul petróleo'?
Tarde siglos en comprender que las cosas pueden ser de color buganvilla, no me jodáis ahora con el petróleo, por favor!! El petróleo es negro como los cojones de un grillo!! (y perdón por la
expresión...)
Pero que bueno, mis felicitaciones a quien te lo envio y a ti por mostrárnoslo, es inevitable la risa.
ResponderEliminarYo tampoco que como es el "azul petroleo", jeje.
Besinos y buen finde.
Jajajajainsssss..., que me desorino!!
ResponderEliminarQué bueno Katy, para ponerle un marco.
Y qué razón tiene "la Tere", la moda es una secta, pero una secta destructiva.
Gracias por el rato de risa.
Un beso.
¡¡¡Jua, jua, jua, ja, ja, ja, ja...!!!
ResponderEliminarLa verdad es que no creo que muchas personas se vean reflejadas en esta historia (he de decir que también los adolescentes -ellos, digo- se pueden ver reflejados aquí).
Desde luego, el ingenio de quien ha escrito este relato es para reconocerlo.
Se lo voy a enseñar a mi mujer, para que también se ría un rato.
Un abrazo y buen fin de semana, Katy.
Jejejeje hay katy esta genial jaja, gracias por compartirlo,un besito y que disfrutes del fin de semana
ResponderEliminarHola,a Katy!! Está buenísimo. Reconozco que me pasa. La verdad que hace reir. Será que uno se ve poniéndose el vestido azul petróleo...La moda incomoda
ResponderEliminarBesossss
No sabéis cuanto me alegra que os hayáis divertido. "Ya sabéis la risa, remedio infalible"
ResponderEliminarYo también me he visto con el vestidito jajajaja.
Gracias Fabia, Elena, Germán, Lucero y Gabriela por dejar vuetra huella sonriente.
Un abrazo y feliz finde.