Comunicación

Comunicación no es la facilidad que tenemos de relacionarnos con los demás, de hacer amigos, de conversar sobre diversos temas, de intercambiar opiniones o compartir problemas íntimos. Esto es relacionarse.

Intervienen factores educacionales, familiares, hábitos, nivel de conocimientos, carácter etc. Algunas personas tienen más carisma, simpatía, magnetismo y desparpajo que otras. ¿Quiere esto decir que los más tímidos, retraídos o introvertidos se comunican peor? Yo diría que se relacionan menos y les cuesta más integrarse.
En grupos pequeños nos relacionamos mejor. Tenemos más oportunidad de participar, y más libertad para expresar ideas, menos miedo y vergüenza de hacer el ridículo porque el trato da más confianza. Los grupos sobre todo con finalidades concretas (como es el de una Escuela de Padres) son caminos abiertos para salir de uno mismo y darse a los demás. A las personas les une la inquietud y el interés común, que crea vínculos y lazos más estrechos. Pero esto no deja de ser una relación.
Para mi la comunicación es otra cosa diferente a la relación.
La comunicación no se aprende ni se adquiere con la práctica. Entiendo por comunicación no aquello que se dice, sino esa chispa que se enciende espontáneamente sin más, sin un por qué en un momento determinado entre dos personas. Es un estado anímico, un sentimiento que desborda a la persona misma, a su razón o conocimientos. No es hablar, contar, comentar ni expresar ideas , ni es cuestión de sinceridad, trato o convivencia. Es ese sufrir o alegrarse ante todo aquello que es causa de sufrimiento o felicidad para el otro. Es así como nacen y se estrechan los vínculos de la amistad, fraternidad y solidaridad que unen a las personas. Es saberse aceptado, y más que saberse sentirse aceptado y querido por lo que se es.
En la comunicación interviene tu yo íntimo y no solo tu razón o mente. Toda la persona se ve involucrada , lo que eres y lo que conoces de ti mismo, tus virtudes y defectos. Todo adquiere tintes diferentes de aquello que analizamos a la luz de la razón. Todo será perdonado, comprendido, asimilado. Es AMOR en el sentido amplio de la palabra.
Lo que si podemos aprender es a relacionarnos mejor. Desarrollar las facultades del habla, perder el miedo escénico, salir algo más para dar lo mejor de nosotros mismos y ponerlo al servicio de los demás. Esto nos hará ser personas más abiertas, positivas y nos enriqueceremos con las aportaciones de los demás a nuestra vida.

"Yo diría que solo cuando tu universo entra en relación con otro universo en la misma frecuencia de onda, entonces, solo entonces se da el milagro de la comunicación medien o no las palabras. "

Es ese algo que fugazmente sintoniza y armoniza con tu yo y que nadie hasta ahora ha desarrollado una fórmula para lograrlo. Durante la reunión me vino a la cabeza una de las rimas más hermosa de Gustavo Adolfo Becker que muy bien podría reflejar mi sentimiento sobre la comunicación:

“¡Ay pensé; cuantas veces el genio
así duerme en el fondo del alma,
y una voz como Lázaro espera
que le diga: “Levántate y anda!”

Katy 5-11-1982