A propósito de margaritas este año ya no he tenido un gran ramo de ellas en mi terraza. Eran la admiración de familiares y amigos y han viajado al norte a un jardín al aire libre porque temía que se secaran.
Cuando se las llevaban me vino a la cabeza un recuerdo de mi juventud, “Deshojar la margarita” No se si alguno de los que me leéis habéis jugado a esto. “Al me quiere, o no me quiere”… mientras ibas arrancando un pétalo a la desdichada margarita, que al final te decía que el que te roba el sueño no te quiere en absoluto. No se de quien ha sido este invento, pero ahora a años luz de aquello me parece un juego de los más ingenuo.
En lo cotidiano a veces en sentido figurado también estamos “Deshojando la margarita” aunque no siempre caigamos en ello.
¿Hará buen tiempo mañana, vendrán a verme los hijos, cobraré el sueldo, me quiere mi novio, me dará tiempo a sacarme el billete a Pernambuco…
¿Aprobaré matemáticas? Pues mira no, si no has estudiado lo más seguro será un suspenso.
¿Me arrancará el coche? Si te has molestado en ponerle gasolina y anticongelante en la batería tienes todas las probabilidades.
Me pregunto cuanto tiempo se nos va en especulaciones inútiles, que si los empleásemos más a fondo no tendríamos que hacernos estas preguntas porque estaríamos buscando soluciones.
Resumiendo, no podemos estar mirando al cielo con los brazos cruzados esperando que caigan las respuestas a nuestras preguntas
Lo peor es cuando se hacen las preguntas vitales y si no hubiese hecho viaje, y si me hubiese casado con en vez de… preguntas que jamás tendrán respuesta más equivoca en nuestra mente que nos engaña con falsos cantos de sirena.
Y así con todo, lanzando preguntas al aire va a ser muy difícil que nos lleguen las soluciones, porque los adultos lo que debemos hacer es poner los medios para que las cosas que dependen de nosotros salgan de la mejor manera posible.
Ni todo pasado fue mejor ni todo el futuro lo será. Lo que realmente importa es tomar cada día nuestras decisiones responsablemente. La vida no tiene vuelta de hoja, ni deshojando margaritas
¿Le gustará a alguien esta reflexión? si-no-si-no….
Katy
Un regalo de mi amiga Elena. Una preciosidad de ramo. Mil gracias amiga, es una pena estropear margaritas.
Yo también recuerdo aquel juego con la margarita, si me salía no, volvía a coger otra hasta que la respuesta era la que deseaba.
ResponderEliminarTienes toda la razón, no sirve de nada lamentarse de lo que pudo haber sido y no fue.
Bss como los tuyos.
No sirve de nada, eso ya no existe y por tanto nos hace perder lo de hoy, lo de ahora. Y a veces si que decimos , si lo hubiera hecho así, o de esta otra manera. No sirve. Lo que si sirve es mirar el pasado para no volver a caer en el presente en los mismos errores.
EliminarBss
Bueno, en cierto modo es el poder de atracción de los augurios. Ya no abrimos animales para leerles las entrañas, pero nuestros genes más atávicos reclaman, al menos, una margarita :)
ResponderEliminarBuenas noches, madame
Bisous
Pues si madame. Así es pero de esto te das cuenta cuando ya eres un poco más mayor, no con 14 y 15 años. Casi nunca me sali que si, o sea que me daba un poco igual jijij.
EliminarBisous
Todos hemos jugado con las margaritas en la búsqueda de respuestas sobre nuestro destino y que en esos momentos nos daban esperanzas.
ResponderEliminarBesos
A mi me salía más noes que sies:-) Prefería la ouija,pero por diversión más que por creerme nada. Soy bastante excéptica.
EliminarBss
ResponderEliminarLo pasado no fue mejor, simplemente éramos mas jóvenes, y ya tomamos nuestras decisiones que nos han traído hasta aquí; está bien preguntarse algo, pero lo importante es dudar lo justo y tener determinación.
El truco de la margarita era empezar con un NO, al final salía SI jeje. Y SI me ha gustado tu reflexión. Que tengas un buen fin de semana.
Ni ha sido ni es mejor. Lo ocurrió hace 5 minutos t¡ya es pasado. Normalmente esto de deshojar la¡ margarita lo hacíamos en grupo, porque así quedaba constancia de que no hacíamos trampa y todas estábamos en el ajo. Era muy divertido. Recuerdos al fin que vuelven sin llamarlos.
EliminarBss.
:D Pues es un poco como leer el zodíaco, supongo... no nos creemos lo que nos cuenta, pero nos gusta hacerlo...Entiendo que el peligro viene cuando le atribuimos veracidad a la superstición y no diré nada más que trae mala suerte :D
ResponderEliminarUn beso, Katy
Claro yo ahora no hago nada de esto. Estaría bueno y creo que no vuelto ver a nadie hacerlo. Ha pasado mucho tiempo de esto. Afortunadamente nunca he sido
Eliminarsupersticiosa:-) Pero si conozco gente que lo es y mucho.
Bss
Claro que he deshojado margaritas, pero ahora son todos certezas y no me atrevo a probar suerte.
ResponderEliminarUn beso.
Jajaja, muy bueno, para deshojarla si sabemos lo que hay y no por hacerlo aunque salga si o no va a cambiar nada.
EliminarBss
Claro que sí me ha gustado esta reflexión, de hecho creo que no lo podías haber dicho mejor y por ello te aplaudo.
ResponderEliminarComparto contigo todo lo que has dicho, pero me temo que eso de deshojar margaritas lo seguiremos haciendo siempre, no tenemos remedio.
Un beso Katy.
Tal vez mentalmente la deshojaremos pero de otra manera. Es el sueño por cumplir y deseo de hacerlos realidad. El ser humano desde los albores ha querido saber su futuro y se ha valido de muchos medios. Pero afortunadamente solo hay casualidades, lo demás incógnitas.
EliminarBss y lindo finde
Una reflexión de lo más sensata, pero qué sería de la niñez sin dudas sobre lo que va a pasar.
ResponderEliminarBesos
Llevas razón era una época de solo
Eliminarsentimientos:-) Luego vino la época de solo cabeza, y ahora con los años están ambos bastante coordinados.
Bss
Claro que he deshojado margaritas y de alguna manera lo sigo haciendo, la vida está llena de dudas y de indecisiones. Pero era más divertido cuando tenía pocos años, como tú lo hacíamos en grupo y siempre eran cuestiones amorosas.
ResponderEliminarMe ha gustado el post. Muy original.
Yo ya no lo hago, ni mentalmente. A pesar de las dudas, de las indecisiones. He aprendido que no sirve para nada al menos para mi, lo que viene vendrá. También he aprendido que tengo que ser la mejor Katy posible y poner los medios para que al menos lo que hay a mi alrededor no sufra por mi causa. Pero los recuerdos a veces saltan solos y por eso vino esta pequeña reflexión.
EliminarBss
Ha quedado muy bien el jarrón de margaritas en esta casa.
ResponderEliminarBesos.
Ya lo creo y no hay que deshojar ninguna. Sus pétalos se caen solos también.
EliminarBss
Katy, ¡qué recuerdos!¿ Me quiere? sí, no, sí, no... y si salía no, pues yo hacía trampa y cogía otra.
ResponderEliminarLa vida no es un deshojar margaritas, tú lo expresas muy bien, pero me ha gustado el recuerdo del pasado.
Un beso y feliz fin de semana :)
Así era, todas soñando como tontas con encontrar ese inexistente príncipe que habíamos soñado. Y quién a esa edad no hacía trampas. Menuda frustración jajaja.
EliminarEso es un pequeño recuerdo alegre que me vino sin esperar.
Bss
Cierto es que desojamos margarita,yo si lo hago y es que me asaltan tantas dudas,a veces soy tan insegura que en mi mente desojo la margarita para ¿encontrar una repuesta?
ResponderEliminarYa vendrá una época más serena en a que ya ni piensas en ello. Ni en dudas, ni en certezas porque da igual. Hago lo que creo que tengo que hacer en cada momento. Me dejo llevar del corazón porque la cabeza a veces también te la juega.
EliminarBss
Me parece una crueldad romper la belleza de una margarita por el mero hecho de conocer la respuesta a una pregunta cuya contestación sobrevendrá con el paso del tiempo. Admiremos su hermosura y su olor, y mientras tanto las dudas se irán disipando. Efecto relejante... ¿qué más se puede pedir?
ResponderEliminarUn besito
Cierto pero 14-15 años no te lo planteas. Juegas con tus amigas y deseas confirmar que tus sueños serán certezas. También se pueden deshojar margaritas con la mente, será o no será. Pero la vida lo termina poniendo todo en su sitio. Y nada será como lo soñado.
EliminarAl menos esa es mi reflexión sobre un pequeño recuerdo.
Bss
Hola Katy.
ResponderEliminarAcabo de enterarme de la partida de tu cuñado.Lo siento.
Nosotros perdimos a una sobrina hace algunos meses y la congoja sigue rondando.
Cada partida es un dolor nuevo y al mismo tiempo antiguo porque nos conecta con otras ausencias.
Pasaré en la semana por tus publicaciones.
Te mando un abrazo enorme y muchos besos.
Muchas gracias Carmela. La vida es así y no hay más vuelta de hoja. También siento lo de sobrina y comparto tu dolor. Es muy triste porque seguro que era más joven. Y es como tu dices. Cada partida es un dolor nuevo y al mismo tiempo antiguo porque nos conecta con otras ausencias.
EliminarBss
Aún veo a los adolescentes deshojando la margarita ....( Me quiere ...Mucho, poquito o nada? )
ResponderEliminarYa de adultos tenemos que tomar decisiones, actuar, solucionar temas, hacernos cargo de lo cotidiano sin descuidar el trabajo.
Y como bien dices, ahora , lejos de aquellos plácidos años , sabemos que la vida no es deshojar margaritas.
Ademas ... son tan bellas.Es cruel quitarles los pétalos....
Besos.
Si que es cruel. Pero en aquellos años de coleguialas ni se nos ocurría pensar en eso. Tenía que salir si por la fuerza jajaja.
EliminarAhora no nos vale deshojar nada, hay que tomar decisiones también si o sí.
Bss